Por lo general, nadar en la piscina puede ser una poderosa forma de hacer ejercicio. Además, es un deporte de bajo impacto que lo convierte en una excelente opción para complementar actividades de alto impacto como el running y CrossFit, a la vez de ayudar en la recuperación muscular y la prevención de lesiones.
En este sentido, si estás buscando un cambio de disciplina, estás pensando realizar un triatlón, o simplemente deseas añadir un nuevo deporte a tu régimen de ejercicios, sin duda añadir la natación será una buena decisión.

No obstante, al iniciarte en la natación es posible que sientas que estás entrando en un mundo desconocido, puesto que los nadadores hablan su propio idioma.

Conoce los consejos que te ayudarán a convertirte en un nadador de alto rendimiento.

6 consejos para ser un nadador de alto rendimiento

1. Establecer expectativas realistas

Algunos deportistas piensan que se puede lograr la aptitud de nadar con solo tirarse a la piscina. Sin embargo, no es la forma correcta de lograr una aptitud para esta disciplina. Puede ser conveniente como runner, pero si vas a una piscina es probable que no puedas nadar tanto.

De acuerdo a los expertos, no tienes que nadar durante 45 minutos o nadar en una piscina de tamaño olímpico. Lo ideal es ir poco a poco. Por ejemplo, tu primer objetivo cuando empiezas en la natación puede ser conseguir en tu primera sesión completar una vuelta a la piscina sin parar e ir aumentando el número de éstas paulatinamente.


2. Cuida la técnica de nado

Los expertos también señalan que muchos principiantes piensan nadar más en lugar de hacerlo mejor. Por ejemplo, hay personas que siempre tienen el deseo de nadar mucho, pero la técnica que llevan no es buena; además pensar en cantidad y no en calidad no te llevará muy lejos.

Además ,es muy común que muchos principiantes cometan el error de moverse frenéticamente en el agua, con un exceso de patadas y tirando sus brazos a través del agua con un amplio arco, en lugar de empujar el agua directamente más allá del cuerpo.

Otro error común es que algunas personas no respiran de manera eficiente mientras nadan. Esto también se ve reflejado cuando mantienen la cabeza de lado a lado y en alto. En su lugar, mantén la rotación de las caderas y luego lleva la cabeza justo encima de la línea de agua para recuperar el aliento.


3. Utilizar un equipamiento adecuado

No requieres de mucho equipo para empezar. Será suficiente un traje de entrenamiento que te haga sentir cómodo, gafas y una gorra. A medida que te vuelvas más hábil, puedes comenzar a usar accesorios de baño para mejorar tu técnica.

Para empezar, puedes ubicar tus manos en una boya de tracción y colocar entre las piernas un trozo de espuma, a fin de que floten las caderas y piernas sobre la superficie del agua.

Recuerda que tu modo de nadar debe ser rítmico, relajado y debe venir de las caderas, no de las rodillas.


4. Saber comportarte dentro de la piscina

Es común ver como los nadadores se organizan en los carriles de las piscinas en función de la velocidad. En algunas piscinas, los carriles están etiquetados como rápido, medio o lento. En caso de que no estén identificados como tales, tómate un momento para observar a los nadadores para luego escoger un carril.
Si por el contrario escogiste un carril que es demasiado rápido, siempre se puede cambiar. Lo importante es que no te avergüences del carril elegido debido a que hay oportunidades para todos los nadadores.

Por ultimo, en caso de requerir un respiro, se aconseja ubicarse hacia la pared, ya que te irá muy bien para recuperarte un poco. En ningún caso deberás detenerte en medio del carril, ya que serás un obstáculo para otros nadadores.


5. Saber planificar tus entrenamientos

En una sesión típica de natación se lleva a cabo un calentamiento, seguido del entrenamiento principal y posteriormente el enfriamiento. Las sesiones de entrenamiento se establecen con frecuencia con la siguiente estructura: 4 x 100 en 2:00, es decir, 2 minutos para nadar 100 metros antes de iniciar la siguiente repetición en el conjunto, para un total de cuatro veces. El descanso está incluido en el intervalo de dos minutos.
Para mantener un control del tiempo, las instalaciones suelen tener un reloj de ritmo, situada en ambos extremos de la piscina. Por ejemplo, la parte superior cuando el segundero llegue a 12 en el reloj significa que debes presionar contra la pared y comenzar tu serie. Si estás nadando con un grupo, por lo general, permiten tiempo de espera de 5 a 10 segundos entre nadadores.

Otro aspecto a considerar es que durante, el entrenamiento, se tienen en cuenta diversos estilos para los conjuntos. Los estilos a cumplir durante la distancia de recorrido está dado por el siguiente orden: mariposa, espalda, braza y estilo libre.


6. Unirte a un grupo de entrenamiento o busca un entrenador

El escenario ideal para cualquier deportista que se quiera convertir en nadador de alto rendimiento, sin importar la capacidad o experiencia, es ejecutar prácticas de grupo.
En este sentido las excepciones son para los adultos que aprenden a nadar por primera vez, y requieren algo de tiempo para sentirse lo suficientemente cómodo para nadar en un ambiente de entrenamiento con otros nadadores. Una vez que estés en condiciones para dar el paso, busca un club o programa de natación local.
Si por el contrario no hay un grupo local en tu área, considera la posibilidad de trabajar con un entrenador de natación. Unas pocas sesiones con un instructor te ayudarán a aumentar tu curva de aprendizaje y es una gran manera de mejorar tu técnica.

Fuente: Entrenamiento.